Imparte vigor, resistencia a las enfermedades y estimula el enraizamiento; ayuda en la formación de proteínas, a la calidad de los frutos y a la rigidez de los tallos; es esencial en la formación y translocación de los almidones, azúcares y aceites.

Es un fertilizante inorgánico de origen mineral. Es el fertilizante potásico de mayor uso.

Ficha técnica